Abro los ojos, miro el techo, cierro los ojos y ganas de no despertarme. Escucho a mis viejos una vez mas tratando de levantarme, ya cansados de que no los atienda, suspiro y arriba. Voy hacia el baño, me pego una ducha mañanera, me cambio cagada de frio (es literal) y desayuno, una vez mas algo que no me gusta.
Mientras espero a que una amiga me pase a buscar, reviso actualizaciones en internet, me arreglo un poco para no parecer desapercibida y en cuanto toca el timbre salgo. Una vez mas piso la calle en una mañana como cualquiera, en camino hacia el infierno que me cambio la vida (y esto tambien es literal).
Asi es un dia normal en la vida de una fulana, dah, digamos una fulanita cualquiera, como me gusta llamarme a veces. No entiendo porque tenemos que ser tan incoherentes a veces, o decirle que no a la rutina, y eso que ven ahi escrito arriba es un ejemplo de rutina muy destacado, Dios, como detesto la rutina, algo tan abstracto como la vida misma no deberia ser rutinario, deberia ser hermoso. Lastima que jamas le vi el lado hermoso a la vida, lastima que siempre estuve mas triste que feliz, bah, que digo, ni se lo que significa la palabra felicidad, creo que si lo supiera, ni yo estaria escribiendo esto, ni vos leyendolo.
A veces no entiendo porque la gente se preocupa en lo que va a hacer, o en las responsabilidades y deseos de la vida, si al final de cuentas se pasa mas tiempo pensando que disfrutando, es patetico, somos pateticos, el ser humano es patetico. Ahora si por favor, inyectenme con aire y dejenme morir en paz. O escribir los siguientes parrafos de este libro.[...]
(No sos igual: Historias de una fulanita cualquiera.)
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